Encuesta por correo |
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Encuesta en la que se obtienen los datos mediante el envío por correo de un cuestionario, solicitando al destinatario que lo conteste y lo devuelva una vez cumplimentado. La encuesta por correo tiene como principal ventaja su reducido coste; además, el cuestionario puede ser contestado en el momento más oportuno para el destinatario. Presenta, en cambio, varios inconvenientes: el principal, es la baja tasa de respuestas que suele obtenerse; además, exige brevedad y una completa y detallada explicación de la forma de contestar a las preguntas, dado que no permite aclarar las posibles dudas del encuestado. Finalmente, no proporciona garantías de que la persona que ha contestado el cuestionario sea la que debía hacerlo. Para incrementar la tasa de respuesta en las encuestas por correo pueden utilizarse varios métodos. Los incentivos económicos suelen ser los más efectivos, no sólo para aumentar la tasa de respuesta, sino también la velocidad de retorno del cuestionario (Chebat y Cohen, 1993). Otras formas de tratar de estimular la respuesta del encuestado, tales como apelar a sus sentimientos egoístas ("es importante para usted ..."), de utilidad social ("sus opiniones pueden ayudar ...") billig nike air max o de ayuda al patrocinador ("necesitamos su ayuda ..."), no suelen producir diferencias significativas en la tasa, calidad y velocidad de respuesta (Childers, Pride y Ferrell, 1980). No obstante, este tipo de apelaciones pueden ser efectivas según la naturaleza de la entidad que patrocina el estudio (una institución pública o una empresa privada). |
Así, por ejemplo, Houston y Nevin (1977) comprobaron en su investigación que si la carta de solicitud de respuesta la enviaba una universidad, el mayor porcentaje de respuestas se obtenía con un reclamo social; en cambio, con una carta de una empresa privada, el reclamo egoísta era el más efectivo. También para incrementar la tasa de respuesta pueden efectuarse varios envíos en solicitud de respuesta. El uso del teléfono como método de seguimiento incrementa significativamente la tasa de respuesta y la rapidez de devolución. Asimismo, el simple procedimiento de volver a enviar un cuestionario, sin carta de presentación, produce niveles de respuesta aceptables a un coste mínimo (Comer y Kelly, 1982). También el fijar una fecha límite para devolver el cuestionario tiene un efecto positivo sobre la tasa de respuesta (Vocino, 1977). En cuanto al cuestionario a utilizar en las encuestas por correo, se ha comprobado que la longitud del mismo no tiene un efecto significativo en la proporción de preguntas dejadas sin responder. Influyen, en cambio, en mayor medida las características socioeconómicas, la edad y el nivel de estudios: los más viejos y con menor nivel de estudios dejan más preguntas sin responder. En cuanto al tipo de preguntas, las que se refieren a actividades, centros de interés y opiniones son contestadas en mayor medida (Craig y McCann, 1978). En la práctica de las encuestas por correo, se ha comprobado que la pauta de retorno de los cuestionarios a lo largo del tiempo suele ser bastante consistente: retornos relativamente rápidos en las primeras etapas seguidos de un decrecimiento gradual. |
